Felices aquellos para quienes el Amor es el mayor tesoro,
que da el sentido definitivo a su vida.
Felices quienes disfrutan haciendo felices a los demás.
Amar es acoger y ponerse al servicio de los demás,
respetando la libertad y respondiendo siempre con amor.
Todo ser humano es amable, no por su méritos o cualidades,
sino porque es amado por Dios.
Todos los seres humanos, incluso los más difíciles,
los que
criticamos y juzgamos,
los que pensamos que son peores que nosotros,
son amados por Dios.
Él es el Agua que nos limpia a todos.
Joseph Falcky